Your cart
No hay más artículos en su carrito
- Gastronomía
- 1 likes
- 213 visualizaciones
- 0 comentarios
- AOVE, AOVE sostenible, Sierra Nevada
La producción de aceite de oliva virgen extra (AOVE) en Sierra Nevada no solo destaca por su calidad excepcional, sino también por su compromiso con la sostenibilidad. En esta región privilegiada de Andalucía, entre las montañas de Sierra Nevada y la proximidad del mar Mediterráneo, se elabora O-Med, un aceite de oliva virgen extra que refleja el equilibrio entre tradición y respeto por el medio ambiente. Este enfoque hacia la sostenibilidad abarca desde técnicas de cultivo responsables hasta el aprovechamiento de los recursos naturales, lo cual permite obtener un AOVE de alta calidad con un impacto ambiental reducido.
Os contamos el proceso de producción de este aceite de oliva virgen extra sostenible, haciendo énfasis en las prácticas utilizadas para proteger tanto la biodiversidad como la tierra de esta región única, incluyendo la colaboración con iniciativas como Olivares Vivos, que contribuyen a la protección de los ecosistemas locales.
Selección y Cuidado de los Olivos
La producción de AOVE sostenible en Sierra Nevada comienza con la selección y cuidado de los olivos, respetando los ciclos naturales de la tierra y evitando prácticas que agoten los recursos del suelo. Los productores implementan métodos de cultivo orgánicos y utilizan abonos naturales, lo cual contribuye a mantener la fertilidad del suelo sin la necesidad de productos químicos dañinos.
Además, se priorizan técnicas de agricultura de secano, que permiten que los olivos crezcan aprovechando el agua de la lluvia. En una región como Sierra Nevada, donde los recursos hídricos son limitados, esta práctica es fundamental para conservar el agua y reducir el impacto de la producción en el medio ambiente.
Protección de la Biodiversidad y el Proyecto Olivares Vivos
La región de Sierra Nevada es rica en biodiversidad, albergando especies endémicas tanto de flora como de fauna. La producción sostenible de AOVE en esta área busca proteger y fomentar esta biodiversidad a través de prácticas agrícolas que respetan los hábitats naturales. Para ello, se evita el uso de pesticidas y herbicidas químicos que podrían afectar negativamente a los ecosistemas locales.
En lugar de estos productos, los agricultores recurren a métodos de control biológico, utilizando organismos naturales para combatir las plagas. Además, se promueve la coexistencia de los olivos con otras plantas autóctonas, lo que crea un ecosistema equilibrado que beneficia tanto a las plantaciones como a la vida silvestre de la región.
La colaboración con Olivares Vivos es un ejemplo claro de cómo los productores de O-Med ayudan a preservar los hábitats naturales en la región. Esta iniciativa fomenta la coexistencia de olivos con flora y fauna autóctona, evitando el uso de pesticidas químicos que pudieran afectar a los ecosistemas locales.
Cosecha y Recolección Temprana
La recolección de las aceitunas en Sierra Nevada se realiza de manera manual o mediante técnicas que minimizan el impacto en los árboles y el entorno. La cosecha temprana no solo contribuye a obtener un AOVE de alta calidad, sino que también reduce el consumo de recursos en el proceso productivo. Al recoger las aceitunas en su punto óptimo de maduración, se obtiene un aceite con una concentración mayor de antioxidantes y polifenoles, lo cual no solo beneficia la salud, sino que también aumenta su estabilidad y vida útil, reduciendo la necesidad de conservantes adicionales.
Esta recolección manual evita el uso de maquinaria pesada que podría dañar el suelo y la estructura de los olivos, y contribuye a reducir la huella de carbono de la producción, manteniendo un enfoque respetuoso con el medio ambiente.
Prensado en Frío y Extracción Sostenible
Una vez recolectadas, las aceitunas se trasladan a las almazaras para su procesamiento. La técnica de prensado en frío es una de las más utilizadas en la producción de AOVE sostenible, ya que permite obtener un aceite de oliva virgen extra de alta calidad sin necesidad de aplicar calor ni sustancias químicas durante el proceso de extracción. Este método no solo asegura que el AOVE conserve todas sus propiedades organolépticas y nutrientes, sino que también reduce el consumo energético. Por eso, en O-Med realizamos el prensado en frío, respetando la extracción sostenible del producto.
Las almazaras en Sierra Nevada suelen contar con sistemas energéticos eficientes, utilizando energías renovables siempre que es posible. Además, muchos productores aprovechan los subproductos de la aceituna, como los huesos, para generar biomasa, una fuente de energía renovable que permite calentar las instalaciones de manera sostenible y reducir la dependencia de combustibles fósiles.
Embalaje y Distribución Ecológica
El compromiso con la sostenibilidad no termina con la producción del aceite de oliva virgen extra; también se extiende al embalaje y la distribución. En Sierra Nevada, los productores de AOVE sostenible, emplean envases de vidrio reciclable o acero inoxidable que protegen el aceite de la oxidación y minimizan el uso de materiales plásticos. Estos envases, además de ser respetuosos con el medio ambiente, garantizan la preservación de las cualidades del AOVE, manteniéndolo fresco y en óptimas condiciones hasta llegar al consumidor.
En O-Med, además de usar envasado sostenible y respetuoso para el medio ambiente, protegemos el vidrio de nuestras botellas frente a los rayos UV, para conservar todas las propiedades de nuestro AOVE.
En cuanto a la distribución, se prioriza el transporte eficiente, reduciendo las distancias y optimizando la logística para minimizar las emisiones de CO2. De esta manera, el AOVE sostenible de Sierra Nevada no solo cumple con altos estándares de calidad, sino que también refleja un profundo respeto por el entorno natural en el que se produce.
Reforestación y Recuperación de Suelos
Una de las prácticas sostenibles más destacadas en la producción de AOVE en Sierra Nevada es la reforestación de zonas afectadas por la erosión y la recuperación de suelos degradados. Al plantar árboles nativos y realizar prácticas agrícolas de conservación, los productores contribuyen a mejorar la calidad del suelo y a protegerlo de la erosión.
Además, los proyectos de reforestación ayudan a capturar dióxido de carbono de la atmósfera, contribuyendo así a la mitigación del cambio climático. Estas iniciativas no solo mejoran la salud del ecosistema local, sino que también benefician a las generaciones futuras, asegurando la sostenibilidad de la producción de AOVE en esta región.
Comentarios (0)